El Feng Shui tiene numerosos consejos
para ayudarte a mejorar tu salud. La salud es lo más importante que tenemos. La
relación entre la salud y el medio ambiente donde vivimos o trabajamos, es muy
importante. El Feng
Shui puede ayudarte a recuperar el equilibrio, mejorar tu
salud y hacerte sentir mejor contigo mismo.
¿Es
saludable tu entorno, desde el punto de vista del Feng Shui? ¿Y tu habitación?
¿Hay aire fresco y renovado en tu casa o empresa?
Muchas
casas y empresas tienen la energía baja y los estudios Feng Shui nos
muestran que la mayoría de los espacios se encuentran por debajo del nivel
básico y necesario para mantener la buena salud de sus ocupantes.
El
estudio Feng Shui incluye equilibrar
los cinco elementos de un hogar, teniendo en cuenta el
equilibrio del yin-yang y muchos otros datos como las áreas del bagua. Somos el reflejo de nuestro entorno
personal, ya que absorbemos la energía que nos rodea. Esta
energía fluye alrededor nuestro y a través de nosotros.
La
salud es uno de los primeros pasos a tener en cuenta cuando se busca aplicar el
Feng Shui en tu hogar. No importa que tu salud este resentida, o que “no” hayas
estado bien de salud desde hace un tiempo, el Feng Shui puede ayudarte a
aumentar tu nivel de energía.
Pasos
básicos del Feng Shui para una buena salud:
1. Aire fresco, de buena
calidad. Muy a menudo ignorado, la buena calidad del aire es de hecho el
número 1 del Feng Shui. Abrir las ventanas y puertas con frecuencia para
airear el espacio e invitar a la naturaleza a entrar. Utilizar inciensos o
aceites esenciales para limpiar el aire. Respirar aire limpio es una de las
bases para tener buena salud y bienestar. Para aumentar el oxígeno y fuerza
vital nos lo aportan las plantas. Elije las que se sean verdes y sanas.
2. Llena
tu casa de luz natural. Esto incluye una buena iluminación. La luz nos aporta
nutrientes y hay que darle al cuerpo la nutrición suficiente de luz. Por
la noche utiliza luz tenue, suave, con reguladores o lámparas de sal, en las
salas donde pasas mucho tiempo.
3. Un
espacio con orden. Sé que no es fácil de hacer pero poco a poco lo iremos
consiguiendo en toda la casa. El desorden agota y bloquea la energía de los que
viven en la casa.
4. Elije
colores que te ayuden a relajarte. Añade azules, lavanda, verdes y otros colores suaves como
los terrosos en tu casa. Ya sea en color de las paredes, ropa de cama, obras de
arte, telas o figuras de decoración, los colores suaves y neutros proporcionan
una sensación de paz. Intenta encender una vela azul, lavanda o de color crema
para la relajación. Deja que la armonía llegue a tu hogar.
5. Es
preferible elegir una habitación que esté situada lejos de los ruidos de calle. Desde el punto de
vista del Feng Shui, la mejor posición de tu habitación está en la parte
trasera de la casa (zona yin). Además, si es posible, intentaremos no ver
la televisión antes de acostarnos, ya que agota nuestra energía. La violencia y
las noticias negativas puede ser absorbido en el subconsciente y puede causar
mal chi.
6. Consigue un ambiente
tranquilo para tu hogar, poniendo un CD de la naturaleza o sonidos naturales, como
las olas del mar, arroyos de montaña, el canto de los pájaros. Al escuchar los
sonidos de la naturaleza, tu ritmo cardíaco se ralentiza, la respiración se
hace más suave y se calma el sistema nervioso. Los sonidos de la naturaleza,
será medicina para tu cuerpo y mente.
El Feng
Shui no es mágico, no te puede traer toda la salud de la noche a la mañana o
librarte de una gran enfermedad, pero si puede reforzar los periodos de mayor
energía en nuestro hogar y que tengamos un chi positivo en los malos momentos.
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